Debemos entonces tomarlo con calma, paseando por la orilla, buscando el mejor lugar y el mejor momento para hacerlo. Allí pondremos piedrecitas que nos ayuden a ir saltando, o nos despojaremos de toda la ropa que nos encadena a este lado del río y nos lanzaremos de cabeza, a nadar, contra la corriente o a favor, pero sin dejar de mirar la otra orilla, donde seguro habrá una mano amable que te ayude a salir, que te regale ropa seca, nueva y de otro color.
Curso 2024-2025 preparo mi anuario escolar
-
Este material es ideal para trabajar durante los últimos días de clase, en
momentos más relajados, como parte de una rutina de despedida o en
proyectos d...
Hace 1 hora
La experiencia nos da la sabiduría y ella nos mostrará el camino más seguro para cruzar. Con la visión de la mano amiga que al otro lado estará para ayudarnos a salir, si las cosas no salen del todo como esperábamos.
ResponderEliminara veces si dan ganas en tirarte de cabeza y no mirar atrás,pero es difícil, muy difícil hacerlo, hay cosas en la orilla que te encadenan, aunque se podria probar con la ilusión de no quedarnos en el intento .
ResponderEliminarNo hay ningún río imposible de saltar.
ResponderEliminarlo mejor es la mano amiga que te espera en la nueva orilla
ResponderEliminar