martes, 25 de enero de 2011

Vente conmigo.


Escucha la ansiedad de mi sangre
El latir de mi feroz deseo
El de acariciarte con la mirada
El de susurrarte con mis manos

Siente los poros de tu piel abrirse
Y agárrate fuerte a lo que estás pensando
Abre tus labios, con los dedos
Ábrete cielo, que es lo que estás soñando.


Vente conmigo anda, vámonos juntos
Súbete encima, muéstrame un número
Dame allí tus labios, allí los quiero
Acércate, clávate en mi lengua, ahí la deseo.

martes, 4 de enero de 2011

Pequeña historia en cien palabras.

“Una semilla en esta tierra desolada será el comienzo de nuestra vida juntos, donde ahora no ves nada habrá un vergel, donde ahora sientes el vacío infinito, tendrás la pasión de alguien que te ama, en tu cajón de las ilusiones volverán los sueños y en tus palabras encontrarás el eco de mis sentidos”.


Esas fueron sus últimas palabras amables, después de aquellas solo tuve la soledad del más vasto desierto, la desilusión y la falta de respeto de quien no te ama, solo tuve el silencio de mis palabras para no encontrar por ellas el sonido de una nueva paliza.

(Con la esperanza de que este año que comienza sea mejor que el pasado.)